Personajes Granadinos del Siglo XX: Eugenia de Montijo

Foto sepia / Colodión

Condesa de Teba, Emperatriz de los franceses.

Nació el 5 de mayo de 1826, en el jardín de la casona familiar, en una tienda allí improvisada durante un terremoto. Hija de Don Cipriano Guzmán y Doña María Manuela de Kirkpatrick, ambos con antepasados ilustres. Hermana de Francisca. Aunque fueron pocos los años que pasó en su ciudad natal, fueron suficientes para que en más de una ocasión mencionase “la hermosa tierra que fue mi cuna”

Su padre, conde de Teba, era un liberal procedente de Galicia que había servido en los ejércitos de Napoleón I, se instaló en Granada a casusa de las circunstancias políticas de la época. Con su muerte, los viajes a Paris de Eugenia con su madre se hicieron cada vez más frecuentes, donde ampliaba el círculo de influencias. La madre de ésta aspira a grandes matrimonios para las hermanas, Francisca se casa primero y pasa a ser la Duquesa de Alba.
A Eugenia no le faltan los pretendientes, ya que destacaba por su belleza e inteligencia, pero se casó con Napoleón III en la catedral de Notre Dame en 1853, años dorados.

Napoleón necesitaba un hijo para el futuro de su imperio y Eugenia se lo dio en 1856.

Foto en blanco&negro / Colodión

En 1859 asume por primera vez la regencia. La oposición empezó a acusarla de intromisión en los asuntos de estado, ya que aunque estuviese casada con Napoleón III, no dejaba de ser “la española”.

En 1865 volvió a ocupar la regencia con motivo de un viaje del emperador.

Napoleón III murió en 1873 y Eugenia siguió ocupándose de la política y restauración del Imperio en la persona de su hijo Luis, pero en 1879 el príncipe desapareció en una expedición de las tropas inglesas en África.

La guerra de 1914 y la posterior derrota alemana la llenaron de satisfacción.

Volvió a España visitando Sevilla y murió en el palacio de los Duques de Alba en 1920.